Hoy en día existen tantos lugares donde se pueden comprar comidas GFCF ya hechas y listas para comer. Hace apenas 10 años, los padres de niños autistas no tenían estas alternativas, pero afortunadamente esto a cambiado a su favor. Ahora, hay compañías que hasta le llevan las comidas GFCF a la puerta de su casa, e incluso, existen compañías que les permiten registrar su pedido desde una pagina de red – por ejemplo: GlutenFreeMall.com – y que cargan productos nutritivos de varios fabricantes. Algunas comidas ya vienen listas para comer, y otras vienen en forma de mezcla, ya listas para cocinar o preparar. Este método es el mas conveniente de todos, pues no requiere de mucho tiempo invertido, pero puede resultar demasiado costoso para muchos padres de niños con autismo, ya que a ustedes les toca calcular una variedad de gastos para poder ofrecerles un mejor futuro a sus hijos.
Piense en la manera en que su bisabuela solía cocinar, antes de que la comida llegara en cajas y se calentara en microondas. Ella hacía una carne, una verdura y un almidón en cada comida, y eso era todo. Nada extravagante ni complicado.
Aparte del dinero, otro factor que suele interponerse en el que uno pueda exitosamente aplicar una dieta GFCF es la falta de tiempo. De por si, a pocos padres les sobra tiempo para hacer muchas cosas fuera de la rutina semanal, la cual incluye una variedad de responsabilidades que pueden ser agotadoras – el trabajo, la escuela, supervisar la tarea, cuidar de los nenes, atender la casa, etc. – entonces quizás no halla tiempo de sobra para que puedan hornear sus panes, panecillos, pasteles. Lo normal es que estas cosas ya se compren ya hechas. Por ejemplo, el pan en lasca, las galletitas, los fideos para la cena pasta, y las salchichas que le fascinan a los niños. Y claro, hasta el comprar estas comidas típicas de supermercado ya preparadas requiere de nuestro tiempo, ya que mucho de nosotros buscamos ventas y hacemos comparaciones de precios entre los productos. Enzima de eso, hay que asegurar de que los productos concuerden con la dieta de los niños.
A los que si pueden brindarle un poco mas de tiempo a la cocina, está el “método de la abuela”, el que nunca falla. Para aplicar este método quizás tengamos que retroceder el tiempo un poco, es decir, en nuestras mentes. Piense en la manera en que su bisabuela solía cocinar, antes de que la comida llegara en cajas y se calentara en microondas. Ella hacía una carne, una verdura y un almidón en cada comida, y eso era todo. Nada extravagante ni complicado. Es una manera de comer de volver a lo básico; es saludable y no utiliza ingredientes pre-hechos. Este es el método mas ahorrativo para llevar una dieta GFCF.